SAN DIEGO- Las tarjetas de crédito y los préstamos médicos prometen aliviar la carga de la deuda médica, pero Consumer Reports advierte pensarlo dos veces antes de pagar de esta manera.
Si estás teniendo problemas para pagar tus facturas médicas, puede resultar tentador solicitar una tarjeta de crédito médica o un préstamo médico ofrecido por el proveedor médico. Pero cuidado, tienen graves consecuencias.
De acuerdo con Luz Plasencia, portavoz de Consumer Reports: "estas opciones pueden tener altas tasas de interés, multas de pago elevadas y dañar tu crédito".
CareCredit es la compañía de tarjetas de crédito médica más grande y es una subsidiaria de Synchrony Financial. Un portavoz de Synchrony dijo que "las opciones de financiación convenientes y transparentes de CareCredit hacen que la atención de salud y bienestar sea más asequible y se puede utilizar para pagar una amplia gama de artículos de salud y bienestar".
Pero, según la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, la tarjeta de crédito médica promedio conlleva una enorme tasa de interés del 27%, mucho más alta que el típico 16% de una tarjeta de crédito de uso general.
Una de las razones principales que advirtió la CFPB es que "nuestra investigación indica que, en muchos casos, los pacientes que usan estos productos terminan en peor situación".
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En lugar de registrarte para obtener una tarjeta de crédito o un préstamo médico, pregúntale a tu proveedor médico si ofrece directamente planes de pago sin intereses o con intereses bajos. Si eso no funciona, considera otras opciones.
"Si tienes buen crédito, puedes considerar un préstamo personal de tu banco o cooperativa de crédito, donde las tasas de interés comienzan alrededor del 10%", dijo Plasencia.
Nunca ofrezcas tu tarjeta de crédito cuando recibas atención médica en una sala de emergencia. Si tienes seguro médico, pide que te envíen la factura a tu compañía de seguros. Si no tienes seguro, pide que te lo envíen por correo para que puedas decidir cómo pagarlo o negociarlo en un ambiente más tranquilo. Y si terminas con una factura del hospital que no puedes pagar, siempre pregunta si existe un programa caritativo al que puedas solicitar ayuda. Puedes averiguar cómo presentar la solicitud en tu hospital específico en DollarFor.org.
