SAN DIEGO- Vecinos de un barrio del este del condado se enfrentan a la trágica muerte de un bebé de 2 meses que fue abandonado en un coche durante varias horas la semana pasada.
El departamento del Sheriff de San Diego está investigando la muerte de la niña, que tuvo lugar el 13 de junio en Santee.
Este martes, NBC 7 habló brevemente con el angustiado padre, que declinó ser entrevistado.
Uno de los vecinos habló de forma anónima con NBC 7 sobre la noche en que ocurrió la tragedia y proporcionó una grabación captada esa noche por la cámara del timbre de su casa. En el video, se observa a múltiples agentes de policía y equipos de primera respuesta llegando a la casa ubicada en Settle Road.
" Estuvieron allí un minuto, dos minutos tal vez ", dijo el vecino a NBC 7. "Luego se fueron, así que supimos que algo malo había pasado".
El Departamento del Sheriff de San Diego dijo que los agentes respondieron a una llamada al 911 la madrugada del 13 de junio y encontraron a la niña que no respondía en un vehículo deportivo en el exterior de una casa. De acuerdo con los investigadores, la niña permaneció en el vehículo durante varias horas a una alta temperatura.
"No puedo entender que se deje a un niño en un coche", dijo el vecino. " Hemos visto que sucede todos los años, que vemos a un niño perder la vida".
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Algunos expertos, entre ellos los del grupo de defensa No Heat Stroke, afirman que al año se registran al menos 37 casos de niños que pierden la vida en circuntancias similares. Indican que esta cifra se duplicó antes de la pandemia, cuando la gente conducía más.
" Tenemos un poderoso sistema de memoria cerebral con piloto automático que nos lleva a hacer cosas automáticamente y, en ese proceso, dejamos de ser conscientes de otras cosas en nuestra mente, incluido el hecho de que hay un niño en el coche", afirmó el Dr. David Diamon, profesor de psicología de la Universidad del Sur de Florida.
Incluso, en días de temperaturas suaves, el calor dentro de un vehículo puede alcanzar niveles peligrosos en una hora, lo que supone un riesgo importante para la salud de los niños pequeños o las mascotas que se quedan dentro.
"Los niños no son capaces de regular eficazmente su temperatura corporal, y sus cuerpos pueden calentarse entre tres y cinco veces más deprisa que los adultos", apuntó la doctora Emily Thomas, de la organización Consumer Reports.
Los detectives indicaron que los socorristas llevaron al bebé al Hospital Sharp Grossmont, donde murió más tarde. La Unidad de Abuso Infantil del sheriff está investigando la muerte. Por ahora, los padres no enfrentan cargos.