Se espera que millones de hogares estadounidenses enfrenten cargas financieras a raíz de la pandemia de coronavirus.
Si te enfrentas a menos horas de trabajo o pérdida del empleo y te preocupa hacer el pago de tu alquiler o la hipoteca este mes, mantén la calma: el presidente Trump dijo la semana pasada que el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano suspenderá "todas las ejecuciones hipotecarias y desalojos" hasta fines de abril .
Dicho esto, aún querrá discutir tus opciones con tu prestamista hipotecario o arrendador si has experimentado una interrupción en tus ingresos. Aquí hay algunos pasos a seguir ahora.
Si eres dueño de casa
Ponte en contacto con tu prestamista
Los planificadores financieros y los defensores de los consumidores están alentando a los propietarios a comunicarse directamente con su administrador de préstamos para analizar las opciones de pago lo antes posible.
"Los prestatarios primero deben comunicarse con el titular de su hipoteca y preguntar sobre los recursos que tienen para retrasar los pagos", dijo John Graff, un corredor de bienes raíces con sede en Los Ángeles, a CNBC Make It. "Muchos prestamistas han implementado exenciones especiales debido a COVID-19, primero debe consultar con ellos".
Los prestamistas tienen ciertas obligaciones bajo sus contratos hipotecarios, dice Ira Rheingold, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Defensores del Consumidor. Si no están dispuestos a trabajar contigo, él sugiere reportarlos a la oficina del fiscal general de tu estado y al Buró de Protección Financiera del Consumidor.
"Tu tienes una relación a largo plazo con ellos y tienen ciertas obligaciones legales", dice Rheingold. "Ponerse en contacto con ellos antes de que te atrases en un pago es algo bueno".
Ponte en contacto con tu banco o cooperativa de crédito (credit union)
Tu banco también puede ofrecer programas en caso de dificultades que puedes aprovechar, dice Kelley Long, planificadora financiera y miembro de los Defensores de la Educación Financiera del Consumidor, un ente del Instituto Americano de Contadores Públicos.
"Tienes que llamar y preguntar al respecto y lo más probable es que seas elegible (a esos programas)", dice Long. "No esperes hasta que tu pago de la hipoteca se venza para averiguar sobre esto, llama hoy. Recuerda que no tienes que aprovechar estos programas, pero vale la pena saber qué hay disponible".
Si eso no funciona, Graff sugiere contactar a tu banco para discutir tus opciones de préstamos personales para continuar haciendo pagos. "Las tasas bajas junto con la benevolencia masiva de las empresas estadounidenses significa que puedes pedir prestado algo de dinero en efectivo para ayudarte", dice.
Muchos bancos ya están preparando páginas de respuesta de coronavirus. Aquí hay algunos importantes:
Ponga su préstamo bajo "indulgencia"
Una alternativa menos que ideal para los propietarios de viviendas es la indulgencia, una opción difícil que le permite posponer los pagos. En inglés se denomina "forbearance" a la acción de abstenerse (el prestamista) de ejercer un derecho legal, especialmente hacer cumplir el pago de una deuda.
"La clave aquí es preguntar acerca de las opciones disponibles para un retraso en los pagos en deterninadas circunstancias difíciles", afirma Mark Hamrick, analista económico senior de Bankrate.com.
Aunque esto puede proporcionar alivio inmediato, aún se acumularán intereses en tus préstamos. Como no pagarás el saldo de tu capital, es probable que debas más a largo plazo porque deberás más intereses de los que pagarías si realizaras pagos regulares.
Si tienes que seguir esta ruta, pregúntale a tu prestamista qué términos pueden ofrecerte. Serán diferentes para cada persona dependiendo de su historial financiero y proveedor de préstamos.
Si eres un inquilino
Avisa al arrendador
Se recomienda a los inquilinos que se pongan en contacto con los propietarios de la vivienda lo antes posible para hablar sobre las opciones de pago parcial o retrasado.
"La mayoría de los propietarios estarían dispuestos a trabajar con un buen inquilino que está experimentando dificultades debido a los acontecimientos actuales", considera Graff.
Elabora un plan de pago
Lo mejor es darle a tu arrendador al menos un pago parcial si puedes, dice Long. Haz un plan con ellos con fechas estimadas de pago y obtén todo por escrito. Ella sugiere usar la siguiente frase colocando tus propios detalles financieros:
Hola propietario, como probablemente sepa, estoy sin trabajo en este momento. ¿Aceptará $500 este mes en lugar de los acostumbrados $1,000?
Si crees que no podrás realizar ningún pago, comunícaselo al arrendador lo antes posible y, nuevamente, pregunta si puedes establecer un plan para pagar una vez que tengas ingresos nuevamente. Long afirma que preguntes si puedes saltarte un mes y repartir el pago durante los próximos seis meses (o lo que sea realista para ti) una vez que vuelvas a trabajar.
"Recuerda que tu arrendador también necesita ingresos, así que aborda esto con empatía por lo que estás pidiendo", dice ella. Deja en claro que "solo pagas tarde en lugar de pedir algo gratis".
También puedes llamar al 211 y preguntar por tu United Way local para ver si están ofreciendo ayuda con el alquiler, sugiere Long.
Busca asistencia externa
Si tu propietario se niega a elaborar un plan de pago, Graff sugiere recurrir a tu banco para obtener un préstamo a corto plazo.
"Muchos bancos están ofreciendo ayudar a sus clientes durante este momento difícil y deberías aprovechar absolutamente la asistencia si la necesitas", comenta.
La vivienda es tu máxima prioridad
La vivienda y la comida deben ser tus principales prioridades, dice Long. Después de eso, tómate el tiempo para averiguar qué sucede con tus otras facturas. Tanto los inquilinos como los propietarios pueden consultar con los acreedores y las empresas de servicios públicos para ver si están ofreciendo asistencia financiera.
"Si tu compañía de servicios públicos está dispuesta a renunciar a los cargos por pagos atrasados y darte un plan de pago con intereses muy bajos para tu factura, pero tu proveedor de Internet no será flexible, puedes optar por pagar tu factura de Internet antes de los servicios públicos", dice ella. "El objetivo es minimizar el impacto a largo plazo de pagar tarde o menos que en su totalidad".
Prohibiciones de desalojo
Antes de que Trump anunciara que el gobierno federal tomaría medidas, muchas ciudades y algunos estados dijeron que implementarían prohibiciones de desalojo de 30 días o indefinidas para que los inquilinos no puedan ser expulsados de sus hogares durante la crisis.
"En Los Ángeles, por ejemplo, los inquilinos que experimentan dificultades debido a COVID-19 califican para la moratoria de desalojo y tendrán hasta seis meses para pagar el alquiler impago", afirma Graff. "Debes consultar los sitios web de los gobiernos locales y estatales para ver si hay opciones como esta disponibles en tu área".
Otras ciudades y estados que hacen esto incluyen Baltimore, Boston, Kansas, Miami, estado de Nueva York, Portland, Sacramento, San Francisco, San José, Seattle y Texas.
La Agencia Federal de Financiamiento de la Vivienda ha pedido a los administradores hipotecarios que ofrezcan opciones a los prestatarios para reducir o suspender los pagos por hasta seis meses, dice Jill Fopiano, CEO de O’Brien Wealth Partners, con sede en Boston. También aconseja a los propietarios que consulten la herramienta "Buscar un consejero de CFPB", que proporciona una lista de agencias de asesoramiento.
"La clave es buscar ayuda y comprender tus opciones tan pronto como sientas que podrías estar comprometido", explica Fopiano.
Esta historia fue publicada en inglés por nuestra empresa hermana CNBC y fue escrita por Alicia Adamczysk.