CIUDAD DE MÉXICO - La candidata opositora Xóchitl Gálvez acusó el domingo, en el tercer debate presidencial, al gobierno de Andrés Manuel López Obrador de "doblarse" ante el expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021), mientras que el opositor Jorge Álvarez Máynez pidió "más firmeza" ante él.
Gálvez, de la coalición opositora Fuerza y Corazón por México, criticó la política migratoria del gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y del movimiento político de López Obrador, la 'cuarta transformación' o '4T'.
“La política migratoria de Morena es hipócrita, la 4T se dobló ante Donald Trump aceptando la devolución de migrantes de otros países sin exigir que al menos hubiera una regularización de nuestros compatriotas que viven en Estados Unidos", sostuvo la aspirante.
Álvarez Máynez, del opositor Movimiento Ciudadano (MC), también cuestionó la actitud del Gobierno ante Trump, pero recordó que vino al país como candidato cuando estaba en el poder el presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018), del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que ahora postula a Gálvez.
“México necesita firmeza e inteligencia en su relación con Estados Unidos, más si llega un racista como Trump al poder. A Trump, Peña Nieto lo recibió y le hizo campaña, una vergüenza", opinó.
La migración fue uno de los temas centrales del tercer y último debate presidencial organizado el domingo por el Instituto Nacional Electoral (INE) de México, que está a dos semanas de la elección presidencial del 2 de junio.
El tema ha ganado notoriedad porque este año coinciden los comicios presidenciales de Estados Unidos y México, que reportó un récord de más de 782,000 migrantes irregulares en 2023, un aumento anual de cerca del 77%.
Ante el panorama, Gálvez prometió "meter orden" en el límite sur de México porque "hay que tener muy en claro que hoy la frontera sur está en manos de los delincuentes, hoy los delincuentes controlan la migración y eso es muy grave".
Mientras que el candidato de MC insistió en el reto que representaría que Trump vuelva a la Casa Blanca tras las elecciones estadounidenses del próximo noviembre.
“Voy a ser un presidente que defienda a los mexicanos en donde estén y para eso hay que hacerlo con congruencia, para exigir respeto en la frontera norte hay que respetar los derechos humanos en la frontera sur, dejar de ser el patio trasero de los Estados Unidos”, comentó.
Sobre el tema, Sheinbaum reconoció que es necesario reformar al Instituto Nacional de Migración (INM) y a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
México tendrá las elecciones más grandes de su historia el 2 de junio, cuando más de 97 millones de mexicanos están llamados a renovar 20,375 cargos federales, incluyendo la presidencia, los 500 escaños de la Cámara de Diputados y los 128 del Senado, así como nueve gobiernos estatales.