Está ubicado justo en el cruce peatonal de la garita de San Ysidro
TIJUANA- En menos de un día, más personas se unieron al campamento improvisado a pocos metros de la garita peatonal de San Ysidro, esto con la esperanza de que les abran las puertas para pedir asilo político a pesar de que no cuentan con una cita a través de CBP One.
De acuerdo con la Dirección Municipal de Atención al Migrante, son más de 70 migrantes, pero apenas 24 horas antes eran alrededor de 30.
“Fue la primera noche, bastante frío, hasta nos cayó brisa y lluvia en la mañana, la verdad que fue algo fuerte, pero aquí estamos; entre todos nos prestamos las cobijas, unos de dormían, otros se levantaban y ahí vamos”, dijo César Segura, migrante venezolano.
Las personas en contexto de movilidad afirmaron que la espera ha sido bastante larga porque a cuentagotas ingresan familias, mientras tanto, no les queda de otra más que resguardar a sus seres queridos del frío, entre ellos muchos niños.
“Como ve esto está muy lento, muy lento, pasa muy lento porque pasan una familia por noche y otra de día, entonces se lleva mucho tiempo”, expuso Marvin, originario de Honduras.
A pesar de eso dicen que no pierden la confianza, como el caso de Lidian Aldana: “sufriendo junto con mis hijos en la calle, pero aquí andamos, a ver qué respuesta nos da Dios, a parte de las personas hay que esperar de Dios también, es el único que está con nosotros”.
Atención al Migrante informó que hay personas de diferentes nacionalidades como rusos, afganos, así como originarios de Centroamérica y Sudamérica a consecuencia de la gran demanda por conseguir el asilo en Estados Unidos.
“Esta situación era predecible, ya se había comentado por el mismo sistema de procesamiento de las solicitudes de asilo provoca esta situación, no es una omisión del gobierno de Tijuana o algo, a estas personas se les tiene que respetar su derecho a solicitar asilo, es un derecho internacional que tienen”, mencionó Enrique Lucero Vázquez, director de Atención al Migrante.
El funcionario municipal reiteró que personas que no saben leer ni escribir, que hablen solo una lengua originaria o que demuestren persecución en Tijuana, pueden ser atendidos sin necesidad de una cita, así como quienes cuenten con una enfermedad grave no tratable en la ciudad o alguna discapacidad.
