Una masacre en Guanajuato
IRAPUATO, Guanajuato - La Guardia Nacional y el Ejército vigilan la escena del crimen mientras los peritos buscan pistas que los lleven a los responsables.
Apenas caía la tarde, dicen testigos, cuando un grupo provisto de armamento de alto calibre llegó a un centro de rehabilitación ubicado en la colonia Jardines de Arandas, de este municipio, y atacaron a quienes ahí se encontraban.
"Lo único que refieren es que llegaron sujetos, se metieron al lugar, los pusieron en el suelo y les dispararon", informó Pedro Cortés, secretario de Seguridad Ciudadana del estado de Guanajuato.
El funcionario reveló que en ese momento había más de 35 personas: 24 hombres murieron al instante.
"No hay reportes de privación de la libertad; únicamente las personas que están en el lugar sin vida y las lesionadas", refirió Cortés.
Esta no es la primera ocasión en la que un centro de rehabilitación en esta región es atacado por grupos criminales que se disputan el control del territorio, entre los que destaca el Cártel de Santa Rosa de Lima que opera en esa área.
Todos los sobrevivientes, indicó el funcionario, aseguran que los asesinos portaban armas de grueso calibre y no les dieron ni tiempo de pedir clemencia.
Los heridos fueron trasladados a diversos hospitales del estado, donde están fuertemente custodiados ante el temor de que los criminales intenten agredirlos de nuevo.
Apenas esta mañana, el presidente de México manifestó que las cosas en Guanajuato ”están mal” en cuanto a la violencia e impartición de justicia, por lo que, dijo: es necesario “hacer una limpia”.
"Porque no está bien, el pueblo de Guanajuato no merece vivir en la zozobra, en vilo, por la violencia", afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En tanto, las familias de los internos se concentran en lugar para tratar de identificar a las víctimas.
"Yo quiero sabre si está en algún hospital, quiero saber, es lo que quiero", solicitó Guadalupe González, madre de uno de los internos.
Y piden justicia para quienes fueron ahí a rehabilitarse y encontraron la muerte.
