Tijuana

Madre hondureña que cruzó con su hijo en brazos por la garita de San Ysidro se reúne con su familia en Chicago

La mujer lleva años intentando cruzar legalmente con sus hijos, algo que muchas veces se complicaba por la condición de uno de ellos que padece hidrocefalia. 

Telemundo

TIJUANA – María Toribia, y sus tres hijos y nietos, se reunieron este sábado con su familia en Chicago, luego de cruzar la frontera hacia San Diego. La madre, y su familia, con un hijo de 14 años con discapacidad en brazos, cruzó la frontera de Tijuana con San Diego de forma legal el pasado 19 de abril.  

El viernes, TELEMUNDO 20 conversó con los familiares que se quedaron desde Tijuana que tienen sentimientos encontrados, pues por un lado aseguran sienten nostalgia de ya no tener a su familia cerca y por otro sienten la emoción de ver a su familia cumpliendo su sueño de llegar a Estados Unidos.

La mujer lleva años intentando cruzar legalmente con sus hijos, algo que muchas veces se complicaba por la condición de uno de ellos que padece hidrocefalia.

“Me siento alegre porque ellas, gracias a dios van adelante y van por un mejor futuro”, dijo Crescencio Matute, hijo de María quien la vio partir desde el albergue Agape Misión Mundial.

Dos madres hondureñas, acompañadas de cinco niños cruzaron desde la garita de San Ysidro en Tijuana, para buscar refugió en Estados Unidos este lunes en la mañana. Más detalles en TELEMUNDO20.com.

La emoción por esta familia se siente en ambos lados de la frontera. Dilcia Matute, hija de María quien le espera desde Chicago, le aseguró a TELEMUNDO 20 que para ella lo más importante es que su hermanito con hidrocefalia pueda tener acceso a un tratamiento en Estados Unidos.

La imagen de María cargando a su hijo de 14 años mientras cruzaba la frontera ya se ha vuelto viral. Para la familia representa la esperanza al acceso a cuidado médico que no han podido darle en su natal Honduras.

“Yo quisiera que recibiera un buen tratamiento o alguien que dijera yo lo quiero apadrinar, no sé hay gente también buena”, dijo, Dilcia.

En el albergue en Tijuana, la emoción es una constante, pues siguen cruzando de forma legal y no son parte del programa MPP. Este jueves seis ciudadanos mexicanos siguieron el mismo camino de María.

“Parece que la próxima semana tenemos más inmigrantes y cómo de aquí a dos semanas también llamaron a otros que también están ya por cruzar, entonces ahorita ya están todos bien motivados”, señaló Alberto Rivera, presidente de la asociación civil Agape Misión Mundial.  

Mientras tanto Dilcia continúa trabajando duro desde Chicago para conseguir dinero y pagar siete boletos que le permitan a su familia trasladarse desde el Sur de California.

“Ahorita ando con el grillete, trabajo pocas horas, pues nomás con la ayuda de Dios y trabajo y como estoy aquí con mis hijos y a mí mamá que le mandaba $100 dólar, $50 dólar, así pues para la leche, los pañales de Toñito, pero ya ahorita gracias a Dios digo yo, espero que me quiten el grillete para poder trabajar más horas”, relató, Dilcia Matute

Dilcia también contó que ella también cruzó desde Tijuana a Estados Unidos de forma legal por medio del programa MPP en el año 2019.

Anhela la reunión con su hija

El que la madre llegue a Chicago implica también una muy esperada reunión con su propia hija. Dilcia explica que con su madre, ha cruzado su propia hija de 8 años, a quien no ha visto desde que cruzó a EEUU en 2019.  

“Ya le fui a comprar una ropita y me estaba diciendo, ay ya voy a llegar con usted, y le digo ya vas a estar acá”, dijo Dilcia.

Y hoy después de ver los resultados de su vida allá, lo único que les recomienda a sus compatriotas es que no intenten cruzar de forma ilegal la frontera.

“A mí me decían vente tírate, pero yo tengo mis hijos, van y me quitan un hijo en el camino o me ponía a pensar, porque tirarse uno por el río o el desierto, no, no, yo no voy a arriesgar a mis hijos”, contó Dilcia.

TELEMUNDO 20 también habló este jueves con Maribel, la hija de María que le acompaña en este trayecto, y dijo que esperan partir de San Diego este sábado camino a Chicago.

Hambre, secuestros, y una separación de dos años: una familia migrante cuenta su odisea que los llevó a California.
Contáctanos