TIJUANA - Este 1 de junio se cumplieron cuatro años de la desaparición de Erick Carrillo, un joven que fue visto por última vez en un bar de la colonia El Dorado en Tijuana.
Desde ese momento no lo han encontrado pero surgió una Fundación que ha localizado a muchas personas desaparecidas, este jueves llevaron a cabo una marcha en Zona Río.
Han sido mil 460 días desde que no saben nada de él, su desaparición marcó un antes y un después en la vida de su familia, así lo relató Eddy Carrillo, su padre.
¨Ese sufrimiento la verdad, me tiemblan las piernas porque cada día que es 1 de junio tengo la impotencia de llorar, de gritar, de muchas cosas y la impotencia porque no sabía ni cómo actuar para llevar a cabo la búsqueda de mi hijo¨, declaró el presidente de la Fundación y colectivo Todos Somos Erick Carrillo.
En compañía de familias que tienen desaparecido a un ser querido, pidieron empatía de la sociedad porque consideran que es algo que le puede suceder a cualquiera.
¨Yo sé el dolor por el que ellos están pasando, porque yo mismo lo pasé, creo que falta un poco de empatía de la sociedad de unirnos, porque cualquiera de nosotros puede ser víctimas de una desaparición o familiar de una persona desaparecida y lo que queremos es que nadie más pase por esto¨, dijo Diana Loza, quien recientemente encontró muerto a su hijo.
México
Otro caso de desaparición fue el de la señora Martha Molina, acudió a un retiro en el Cerro Coronel de Rosarito, pero desde hace 26 días no tienen información de su paradero.
¨Mira sus ojos, mira los ojos de la gente, ese vacío, ese hueco que tenemos en medio y esa rabia es un infierno, es una angustia, el no saber cómo y dónde está, si está viva, muerta, si me le hicieron algo¨, dijo a TELEMUNDO 20 Rafael Rivera Molina, hijo de la señora.
Para los familiares, es un peregrinar diario tratando de obtener alguna señal que les permita localizar a su ser amado, así lo expuso Rita Flores, quien desde hace dos años busca a su hijo.
¨Es algo que nos quitan de nosotras, algo que no nos deja vivir en paz por no saber dónde está, dónde se lo llevaron, qué le hicieron, es una incertidumbre de despertar y saber que no está, con la esperanza de un amigo, alguna llamada y digan donde se encuentra¨.
Con el recorrido y con un minuto de silencio, recordaron con cariño a sus amigos y familiares, a quienes esperan volver a ver con vida.
De acuerdo con el líder de la Fundación Todos Somos Erick Carrillo, a lo largo de los años son cerca de mil 80 personas las que han encontrado gracias a innumerables jornadas de búsqueda.