SAN DIEGO- El naufragio del fallido intento de tráfico de humanos en Point Loma este domingo es, según expertos, la viva imagen de la desesperación de miles de migrantes de cruzar a Estados Unidos.
Se trata de migrantes que dejan todo por una mejor vida sin saber si sus últimos días de vida podrían estar cerca.
Como una escena sacada de una película de terror, así describió una testigo lo que sintió al ver cómo un barco de más de 40 pies se hundía en estas aguas y personas intentaban no ahogarse.
Aunque de los 32 migrantes que viajaban en ese barco pesquero, 29 sobrevivieron, sus sueños de una mejor vida se quedaron en el océano Pacífico y se convirtieron en pesadillas.
“Está muy caótico”, dijo Emma Ramírez, testigo del naufragio. Recordó al barco hundiéndose, mientras decenas de personas gritaban pidiendo ayuda desesperadamente.
Estaba ahogado tirando agua de su boca
-Emma Ramírez, testigo del naufragio.
“Empezaron hacer sus manos así porque el barco ya casi estaba si a un lado así”, dijo Ramírez.
Y es que los migrantes brincaron para evitar morir ahogados e intentado llegar a la playa. “Ves a todos con sus chalecos saltando”, apuntó.
Cuando el barco pesquero de 45 pies se hundía en las costas de Point Loma y migrantes intentaban no hundirse junto con sus sueños de una mejor vida en suelo estadounidense.
Familias mexicanas como las de Francis Javier, David Mirón, José Tapia, Eduardo Hernández, Issac Mateo, Everardo Maya, Salvador Pérez, Javier y Luis Mario Hernández, Héctor Lucilio, José Isidro y Prisilla Valentín, que quedaron destrozadas.
El Consulado de México informó que estaba entrevistando a los sobrevivientes, además de proveerles asistencia médica, los auxilian con su repatriación.
