SAN DIEGO- En el día de los muertos, hay quienes ponen ofrendas, comen pan de muerto pero para algunas personas es un día de mucho dolor, como dos familias quienes hablaron con TELEMUNDO 20, sobre lo difícil que ha sido enfrentar la perdida de sus seres queridos.
Cada una de las flores y tumbas en un cementerio representan el dolor una madre, hijo, o cualquier persona que haya perdido a un ser querido, muertes que quienes lo han vivido aseguraron abren una herida que nunca sana por lo que su única opción es aprender a vivir con el dolor.
"Yo le veo sus ojos y lo huelo, todos los días", dijo Norma, quien perdió a su hijo, Jose Manuel de 22 años hace más de 4 años.
Más para ella es como si hubiera sido ayer.
"Es un dolor devastador, un dolor que no tienes explicación o nombre porque te destrozas completamente te deshaces", dijo.
Dolor, que le impide hablar de las circunstancias por las cuales le arrebataron a su único hijo varón, esta madre aseguró que la pérdida de su niño, le causo una depresión por 4 años y que la cambió para siempre.
"La persona que era yo antes, nada que ver, veo la vida diferente simplemente la muerte la veo diferente, no le tengo miedo yo me quiero ir", dijo la madre.
Un dolor de madre similar al que Valeria Gómez sufre.
"Es un dolor que nadie sabe cómo se siente solo una mamá", dijo Gómez.
Su hijo, Abram Santos fue asesinado a sus 37 años dejando a siete hijos sin padre.
"Él es el que me hacía feliz, y ahora la mitad del mundo se ha ido", dijo Sara, quien a sus 15 años perdió a su papá, y no ha podido empezar a sanar ese dolor.
Su abuela aseguró que el fallecimiento de su hijo puso un manto negro sobre su familia. Ella aseguró que desde ese 13 de febrero del 2022, cuando la muerte tocó a su puerta, ni ella ni sus nietos son los mismos, más intentan hacer de sus días unos mejores.
"Todos los días hablamos de él, siempre su nombre sale de mi boca todos los días, como si estuviera aquí todavía y yo sé que ahí está", dijo Gómez.
De acuerdo a Norma, aunque hay personas con buenas intenciones, lastiman más con sus palabras en su intento de dar consuelo.
"Te dicen 'Dios se lo llevó porque era bueno, porque lo necesitaba', que se lleve a los que violan y venden órganos, ¿Por qué a mi hijo que era bueno?", señaló.
Por lo que aconsejó a quienes desean ayudar alguien en duelo, cuidar sus palabras.
"Estar presente y decir estoy orando por ti, si eres creyente, y aquí estoy acompañándote, pero lo demás no", indicó.
Ahora, Norma, ayuda a otros padres a enfrentar sus pérdidas. Ella aseguró que llegar aquí no fue nada fácil, y requirió de mucha ayuda profesional y apoyo de sus seres queridos por lo que tiene consejos para quienes están atravesando un duelo.
"Que tengan paciencia, porque no podemos ayudar a nadie más y tomen cursos y vayan con una persona que perdió un hijo si hablamos de hijos", dijo.
Manteniendo la memoria de sus seres queridos viva es como estas madres e hijos dicen han podido enfrentar la perdida de sus hijos y padre. Aunque aseguraron que el dolor de esa muerte, siempre estará ahí, es lo que las hace fuertes para sobrevivir.