CORONADO- En una carta a la Federación Interescolar de California (CIF, por sus siglas en inglés), el jefe de las escuelas de Coronado dijo que la investigación del distrito sobre un incidente de lanzamiento de tortillas después de un juego de campeonato el fin de semana pasado no había arrojado ninguna evidencia que requiriera que la Preparatoria Coronado perdiera el juego.
La carta de tres páginas del superintendente del Distrito Escolar Unificado de Coronado, Karl J. Mueller, al director ejecutivo de CIF, Ron Nocetti, tiene el sello de hora a las 7:01 a.m. del viernes.
Desde el juego del campeonato divisional del sábado pasado, en el que Coronado venció al visitante Orange Glen 60-57 de Escondido en tiempo extra, activistas comunitarios y otros han pedido que Coronado pierda el juego, ya sea voluntariamente o para que el CIF lo elimine.
En la conclusión de la carta, Mueller escribe que “no hemos visto evidencia de antagonismo por parte de las acciones o comportamientos de los jugadores que justifiquen perder el juego. Los jóvenes en la cancha jugaron duro, de manera justa y ganaron el campeonato”.
La carta de Nocetti sigue a una semana de controversias. La historia ha atraído la atención nacional después del lanzamiento de tortillas, que muchas personas han calificado de racista, y ha destacado a la comunidad isleña de Coronado, en su mayoría blanca, de lujo. Más del 80% del alumnado de la escuela secundaria Orange Glen de Escondido es latino.
Después del timbre final, pero antes de que los equipos de cada lado se dieran la mano en una tradición posterior al juego, la gente del lado de Coronado arrojó tortillas al equipo de Escondido y, según los entrenadores de Orange Glen, les dijo que salieran de su gimnasio.
Hubo una disputa entre el personal técnico de ambas escuelas. Un video ampliamente compartido en las redes sociales mostró al menos a dos estudiantes de Coronado lanzando tortillas al aire hacia el otro equipo.
La carta decía que la investigación del juego por parte del distrito arrojó evidencia que mostraba un comportamiento lamentable por ambas partes.
Mueller sostiene en la carta que CUSD no tiene una “agenda” y escribe que, “de acuerdo con múltiples relatos de testigos, cobertura de audio y video y declaraciones personales de los involucrados”, el distrito entiende que “Numerosas declaraciones hacen referencia a las acciones de las personas que representan ambas escuelas contribuyeron a crear una atmósfera de ‘barril de pólvora’”.
Mueller agregó que “hay acusaciones de lenguaje inapropiado por parte de los fanáticos, entrenadores y jugadores de CHS y OGHS que varían en quién ‘comenzó’ o fue ‘peor’ en estas interacciones”.
Ambos grupos se comportaron de maneras que no son consistentes con el código de ética de CIF, determinó la investigación del distrito de Coronado, con la carta que indica que las tortillas fueron arrojadas después de que “adultos alrededor de la mesa de anotadores, que representan tanto a OGHS como a CHS, intensificaron las tensiones al usar blasfemias e insultos en lugar de modelar un buen espíritu deportivo”.
Mueller continúo escribiendo que el lanzamiento de las tortillas “causó una ofensa y sometió a nuestros huéspedes y residentes de Coronado presentes a sentimientos relacionados con la discriminación” y que lo más honorable que se debe hacer después de tal incidente es disculparse, lo cual hace: “Lo estaba y lo siento profundamente”.
Mueller también escribió: “Estamos coordinando experiencias para que los estudiantes de nuestras dos escuelas se reconcilien a través de una lente de comprensión” y que “seremos una comunidad escolar mejor y más fuerte a través de nuestra voluntad de reflexionar y crecer con humildad”.
Desde el juego, la Junta Escolar Unificada de Coronado votó unánimemente para despedir al entrenador JD Laaperi.
Laaperi dijo en las redes sociales antes de su despido que un miembro de la comunidad trajo las tortillas al juego y que el incidente era “inaceptable y de naturaleza racista” y que no lo toleraba.
El miércoles, TELEMUNDO 20 se enteró de que un alumno de Coronado, Luke Serna, anunció que había traído las tortillas al juego y negó que hacerlo tuviera un componente racista. Sostuvo que estaba evocando una tradición en UC Santa Barbara, a la que también asistió. Sin embargo, personas familiarizadas con la práctica del lanzamiento de tortillas en eventos deportivos, dicen que la intención a menudo es distraer durante los juegos, no como una celebración después de una victoria, aunque una búsqueda en Internet arrojó resultados que describen a personas que arrojan tortillas después de la UC Santa. Barbara Gauchos marcó un gol.
