Telemundo 20 tuvo acceso a la zona de la frontera en Otay Mesa donde ya iniciaron las obras de construcción del cerco secundario que reemplazará la valla actual que tiene más de 20 años de vida.
Se trata de un muro que medirá cerca de 30 pies de altura y estará hecho de acero sólido.
“En total se reemplazarán 12.5 millas desde la zona de playas de Tijuana hasta la zona de Otay Mesa, pero también se añaden 1.5 millas de nuevo cerco hasta las montañas, donde ahora sólo existe un cerco primario”, dijo Vincent Pirro agente de la patrulla fronteriza.
De esta manera la patrulla fronteriza espera tener más tiempo de maniobra para realizar arrestos de migrantes que intenten cruzar de forma ilegal.
Sin embargo, activistas creen que esta nueva edificación no detendrá el flujo de migrantes indocumentados.
“Empujan a los migrantes a lugares de mucho más peligro y ahí vemos el alto número de personas que mueren cada año”, dijo el activista Pedro Ríos.
Hay fotografías que muestran las marcas de cortes que se han hecho sobre la malla metálica que será reemplazada por un diseño casi idéntico al del cerco fronterizo primario.
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“Los migrantes pueden escalar, hemos visto videos donde las personas escalan el muro en segundos”, dijo Ríos.
Mientras tanto, en el lugar ya se puede ver la maquinaria de construcción y a los empleados trabajando en la obra. Incluso es posible que los 8 prototipos del muro ubicados en el mismo lugar sean derribados para que el proyecto pueda ser completado.
Una vez concluidas las obras habrá doble cerco de metal de hasta 30 pies de alto entre San Diego y Tijuana.
Se estima que el costo total de las 14 millas de construcción será de 131 millones de dólares, presupuesto que fue aprobado en el año 2018.
