ESTADOS UNIDOS- Hace más de un mes que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden volvió a comprometer formalmente al país con el Acuerdo de París. Y dado a este importante desarrollo, aquí repasaremos el Acuerdo de París y los pasos que el país tendría que tomar para combatir el cambio climático.
¿Qué es el Acuerdo de París?
El Acuerdo de París es un acuerdo internacional diseñado para evitar el cambio climático catastrófico. En resumen, su objetivo principal es:
"Mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de los 2°C [3,6°F] por encima de los niveles preindustriales y realizando esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura a 1,5°C [2,7°F] por encima de los niveles preindustriales, reconociendo que esto reduciría significativamente los riesgos e impactos del cambio climático". (Artículo 2, párrafo 1a)
El Acuerdo de París exige que los países participantes, 195 en total, evalúen sus propios compromisos para luchar contra el cambio climático. Estos compromisos, llamados Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDC por sus siglas en inglés), describen los planes de cada país para reducir las emisiones de carbono y aumentar la adaptación al clima.
El Acuerdo de París reconoce que, debido a sus circunstancias económicas y tecnológicas, algunos países necesitarán asistencia para cumplir sus contribuciones. En particular, es posible que los países en desarrollo puedan no tener los recursos financieros para transformar su sector energético a fuentes con bajas emisiones de carbono. Es posible que las pequeñas naciones insulares, que contribuyen emisiones mínimas pero son muy vulnerables a los impactos climáticos, no tengan la infraestructura para adaptarse a huracanes dañinos o al aumento del nivel del mar. Así, para alcanzar colectivamente el objetivo de 1,5°C/2°C, el Acuerdo de París establece explícitamente que los países desarrollados proporcionarán recursos financieros a los países en desarrollo.
El Acuerdo también comisionó una evaluación científica en profundidad de los impactos relativos de limitar el calentamiento a 1,5°C frente a 2°C. Ese estudio, publicado en 2018, concluyó que 1,5°C reduciría en gran medida los impactos del cambio climático en los seres humanos y los ecosistemas por igual y que cada décima parte de un grado de calentamiento adicional importa.
Local
¿Estamos en camino de alcanzar nuestra meta?
Según el informe de la ONU sobre la brecha de emisiones de 2019, el logro del objetivo de 1,5°C requeriría una disminución de las emisiones mundiales del 7,6% anual de 2020 a 2030. En el caso del objetivo de 2°C, la disminución tendría que ser del 2,7% anual. Para poner en perspectiva el trabajo pesado que implicaría, las contribuciones de cada país tendría que fortalecer su posición actual tres veces para una vía de 2°C y quintuplicarse por una vía de 1,5°C. Así que, al momento todavía no estamos en camino de alcanzar nuestra meta.
Cerrar la brecha es una tarea abrumadora, pero hay algunos destellos de esperanza que nos apuntan en la dirección correcta:
- Momento Cero-Neto: Según el Informe de Brecha de las Naciones Unidas de 2020, un total de 126 países han adoptado, prometido o considerado recientemente la reducción cero-neto para mediados de siglo, lo que representa alrededor del 51% de las emisiones de efecto invernadero del mundo. Si se implementasen, los planes “net-zero” podrían ayudar a aumentar ese 51% a 63%. Si los países convierten sus compromisos cero-neto en acciones concretas, estaremos más cerca de los objetivos de París.
- Posible Recuperación Económica Verde de COVID-19: Los países podrían utilizar potencialmente la recuperación de la pandemia COVID-19 como una oportunidad para introducir iniciativas verdes. Ejemplos de ello podrían ser la detención de nuevas plantas de carbón, la promoción de tecnologías basadas en cero emisiones y la introducción de más empleos verdes en la economía.
Además, la Administración Biden ha hecho claro que Estados Unidos reanudará un papel de liderazgo en el trabajo para estimular una acción ambiciosa en virtud del Acuerdo de París, incluyendo la celebración de una Cumbre de Líderes del Clima Internacional en el Día de la Tierra, el 22 de abril de 2021.
¿Cómo avanzamos?
Uno de los aspectos más importantes, pero menos comprendidos, del Acuerdo de París es el requisito de que los países actualicen sus contribuciones cada cinco años, a partir del 2020. (Este proceso estaba programado para comenzar en 2020, pero debido a la pandemia de COVID-19, se pospuso hasta 2021.) Durante las negociaciones que condujeron al Acuerdo de París, los negociadores reconocieron que la ronda inicial de contribuciones no conduciría al logro de los objetivos del acuerdo. Por lo tanto, incluyeron en el acuerdo un proceso a través del cual las contribuciones pueden fortalecerse con el tiempo a medida que los avances tecnológicos, la caída de los costos y otros factores hacen posible una mayor ambición. La reunión de 2021 de las partes en el Acuerdo de París, prevista para noviembre en Glasgow, Escocia, será una oportunidad clave para el progreso, especialmente si los países integran la respuesta COVID-19 y los objetivos climáticos.
El Acuerdo de París exige una de las mayores transformaciones globales, física y de conductas, que el mundo haya emprendido. Afortunadamente, gran parte de la experiencia y muchas de las tecnologías necesarias para lograrlo ya están disponibles y son cada vez más asequibles. ¿Desea obtener más información sobre las posibles soluciones para combatir el cambio climático? Manténgase atento a nuestros informes de soluciones de Climate Central que proporcionan antecedentes y recursos sobre los siguientes temas:
- Energía solar
- Energía eólica
- Electrificación de vehículos
- Electrificación de edificios y eficiencia energética
- Captura y almacenamiento de carbono
- Biocombustibles y transformación de la agricultura y hábitos alimenticios
- Adaptación al clima y resiliencia