SAN DIEGO- Su hijo de 16 años fue encontrado sin vida en su cuarto de celda, ella aseguró que el menor murió por una sobredosis de fentanilo, y que hasta el momento no se explica como llegó esta substancia a manos de su hijo.
Ella también señaló que hasta el momento, supuestamente no puede ver el cuerpo del menor.
“Cuando fueron a despertar a su hijo su hijo ya no despertó y me dijo señora su hijo falleció”, dijo Brenda Arguelles, su hijo murió dentro de un centro de detención de menores.
Según oficiales del Departamento de Libertad Condicional del condado de San Diego, el miércoles 8 de septiembre poco después de las 7 a.m. iniciaron una investigación sobre el fallecimiento de un adolescente en el centro de detención de menores en Kearny Mesa.
“No tenían más detalles de la razón porque mi hijo había muerto solo que habían encontrado dormido no presentaba síntomas de golpes de algún trauma”, señaló Arguelles.
El personal médico de las instalaciones y el departamento de bomberos respondieron, pero no pudieron salvarlo.
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“Mi hijo ya tiene los resultados de la autopsia el falleció por sobredosis de fentanilo una droga ilegal que fue consumida aquí en este lugar centro de menores”, recalcó Arguelles.
La madre dijo que su hijo Alan Arguelles de 16 años había ingresado al sitio desde mayo y le faltaba poco de un mes para salir.
“Él estaba muy emocionado nos miraba más feliz le estaba echando más ganas me decía que todo lo estaba haciendo bien, tenía planes de trabajar”, dijo la madre.
Pero por desgracia esos sueños no se cumplieron, pues estaban planificando la fiesta de los 17 años que cumpliría el 19 de octubre.
“Todas las 24 horas estan vigilados hasta las llamadas telefónicas estan vigilados”, añadió la mujer.
Ella dijo que no se explica cómo la substancia llegó a manos de su hijo que le quitó la vida.
En un comunicado el condado de San Diego dijo: "si bien la libertad condicional no puede comentar sobre este caso específicamente debido a la investigación en curso, podemos compartir que los oficiales siguen protocolos bien establecidos para hacer que la seguridad de los jóvenes y los oficiales sea una alta prioridad al evitar que se lleven sustancias ilegales, armas u otros artículos prohibidos al centro de menores. En el momento de la admisión, se evalúa a cada joven en cuanto a qué tipo de cargos o violaciones condujeron a su detención. Se le pregunta al oficial que lo arrestó si el joven tenía narcóticos o armas en su persona en el momento en que fue detenido. Todos los jóvenes están sujetos a un registro de su ropa y son registrados en busca de armas con un detector de metales. Si hay motivos para creer que un joven puede tener algún artículo prohibido en su persona, entonces se puede realizar un registro sin ropa. Además, a todos los jóvenes se les ofrece una ducha al momento de la ingesta. En ese momento, los agentes registrarán la ropa del joven, que luego se guardará, y al joven se le entregará ropa institucional".
“Quiero justicia que me den a mi hijo que me dejen verlo y que pare porque mi pregunta es que hacia mi hijo para que le dieran la droga”, reconoció Arguelles.
Entre cánticos, lágrimas y abrazos, este sábado, familiares y amigos se unieron frente al sitio donde falleció en busca de respuestas.
“Que tienen que hacer los niños para conseguir la droga que tuvo que hacer mi hijo para que se la dieran”, manifestó Arguelles.
