SAN DIEGO- Desde que comenzó la pandemia, el cierre de la frontera a viajes esenciales se ha prolongado en múltiples ocasiones. Y mientras que del lado estadounidense, la frontera luce vacía, algunos tijuanenses aseguraron que desde que las restricciones entraron en vigor el pasado 21 de marzo, la fila de sur a norte ha incrementado.
“Eh visto muchos mensajes de que crucemos lo mínimo de que estar cruzando la frontera seguido para cosas no esenciales no es positivo para la región y que los contagios siguen en aumento tanto en San Diego como Baja California”, señaló Mario López, quien vive en Tijuana y cruza a San Diego por cuestiones médicas.
Debido a un repunte de casos de COVID-19, el cierre parcial se extendió en la frontera, así lo anunció el canciller Marcelo Ebrard.
“Las filas siguen muy largas y muy lentas lo cual no entiendo porque si entiendo que mucha gente ha dejado de cruzar”, dijo López.
Los viajes esenciales incluyen a ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes.
“Sí veo y eh conocido a gente que no tiene green card o no es US citizen que los regresan o que ha tenido problemas para llegar al médico”, añadió López.
Personas que viajan con propósitos médicos, aquellos que viajan para asistir a instituciones educativas, personas que viajan con fines médicos, viajeros involucrados en el comercio transfronterizo legal, personas, miembros de las fuerzas armadas de Estados Unidos, personas involucradas en viajes u operaciones militares.
“Yo entro a las dos a mi trabajo y me despierto a las 8 o 9 checo la fila a ver si hay mucha y depende me vengo un poco más rápido o me espero”, dijo Sebastián.
Él señaló que el cruce de los empleados esenciales de Tijuana ha subido.
“No he notado ninguna diferencia, no nos chequean la temperatura, no nos dan hand sanitizer, nomas nos dejan pasar como si nada”, señaló Janet Estebame.
