SAN DIEGO- Un hombre sospechoso de apuñalar a su esposa hasta la muerte delante de sus hijos pequeños en su casa de Chula Vista hace cuatro años, y luego huir a México, compareció este miércoles ante el tribunal del condado de San Diego.
Francisco Caldera Uriarte, de 41 años, se declaró no culpable de un cargo de asesinato en primer grado y dos cargos de crueldad infantil intencional en relación con el asesinato de su esposa Natalia de 35 años, el 29 de marzo de 2020.
Uriarte fue detenido en México en mayo y la semana pasada fue puesto de nuevo bajo custodia de las fuerzas de seguridad estadounidenses en San Diego, según el Departamento de Policía de Chula Vista.
Los fiscales dijeron que Uriarte había estado prófugo en México desde el asesinato y un juez estuvo de acuerdo en que "eso lo convierte en un riesgo de fuga muy significativo". A Uriarte se le denegó la libertad bajo fianza.
Caldera se declaró no culpable de la muerte de su esposa, a quien de acuerdo al procurador del caso, asesino violentamente y sin piedad
El ataque se produjo durante una pelea en su apartamento en el bloque 500 de la calle Oxford, alrededor de una milla y media al oeste de Castle Park High School, dijo la policía de Chula Vista.
En ese momento, la policía dijo que los agentes recibieron una llamada de un vecino que afirmaba haber oído a una mujer gritar alrededor de la 1:38 a.m. Una vez que los agentes llegaron al complejo de apartamentos, encontraron a tres niños - gemelos de 9 años y un niño de 3 años - que dijeron que su madre y su padre habían estado en una pelea física, informó la Policía de Chula Vista.
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Los agentes encontraron a Natalia Uriarte, que trabajaba como maquilladora, muerta y a su marido desaparecido.
El primo del sospechoso dijo a la policía que Uriarte había dejado un mensaje de voz amenazante a un hombre con el que creía que salía su mujer.
Los niños, que no resultaron heridos, dijeron a los agentes que su padre había huido de la escena y que creían que había matado a su madre durante la pelea, dijo CVPD.
Un juez también emitió una orden de protección para los niños, que según el fiscal han estado a salvo desde la noche del tiroteo.
Al día siguiente del asesinato, la policía de Chula Vista hizo pública una fotografía de Uriarte, de quien se creía que había matado a su mujer y al que se consideraba armado y peligroso.
Uriarte ingresó el jueves en la cárcel central de San Diego como sospechoso de asesinato y de poner en peligro a menores. Se encuentra detenido sin fianza a la espera de la lectura de cargos, prevista para el miércoles.