TIJUANA- Frenar la ola de violencia en Tijuana no es tarea fácil. Durante meses se ha reforzado la seguridad con elementos del ejército mexicano que llegan periódicamente a esta ciudad fronteriza.
Aun así, Tijuana está por alcanzar la cifra de 1,000 homicidios en este 2022, lo que no ha permitido disminuir la percepción de inseguridad de la comunidad.
De acuerdo con el secretario de seguridad ciudadana, Fernando Sánchez, a partir de este miércoles arrancaron los nuevos operativos en coordinación que realizan las autoridades, tras el arribo de 400 elementos del ejército mexicano que reforzarán la estrategia de seguridad en este municipio.
“La criminalidad va migrando va moviéndose de una zona a otra tenemos que ir también analizando estos factores y vamos modificando en consecuencia. Hemos estado trabajando y diseñando nuevos patrones de patrullaje que vamos a llevar a cabo”, dijo Sánchez.
Y es que los hechos violentos parecen no tener fin.
A pesar de que los homicidios tuvieron una reducción del 24% durante los primeros seis meses de este 2022 en Baja California, y un 17% en Tijuana, no fue suficiente para que la ciudadanía recupere la paz.
Incluso visitantes recién llegados a la ciudad como Blanca Esthela Sabines, les tocó ser testigos del lado oscuro de la ciudad.
“La primera vez que llegué vi un muerto. Yo vengo de México, como que si se queda uno ‘de a seis’ la verdad, entonces uno que no está acostumbrado eso pues si lo ve como que un poco de miedo”, dijo Sabines a TELEMUNDO 20.
De acuerdo con el presidente del Consejo ciudadano de seguridad pública de Baja California, Roberto Quijano, a pesar de la reducción, el número de asesinatos en esta ciudad fronteriza sigue siendo sumamente elevado. Pues tan solo en este mes de julio ya suman más de 60 homicidios y 972 en los que va del año.
“El tamaño de la delincuencia y de los homicidios en Tijuana es tan grande que aún con una disminución, que es el 17% seguimos, estando entre las 10 ciudades más violentas del mundo, entonces tendría que bajar la incidencia un 40%, un 50% de los homicidios, para tan siquiera pensar que Tijuana salga de ese lastimoso lugar”, afirmó Quijano.
Desde finales del año pasado, la estrategia de seguridad del gobierno federal para municipios prioritarios como Tijuana, es el reforzamiento con elementos militares.
La tarde del martes, 400 elementos del ejército llegaron a la ciudad, quienes se sumaron a las labores que junto con la guardia nacional, buscan contener los homicidios en este municipio, de acuerdo con el comandante de la segunda zona militar, Saúl Luna.
“Son el relevo de otros 400, son 200 de fuerzas especiales, 200 paracaidistas. Son 1,000 del ejército y 2,000 de la Guardia Nacional”, dijo Luna.
Según Enrique Martínez, comandante de la Guardia Nacional, tanto efectivos militares como elementos de esta corporación participarán en la “Operación contención”, que va dirigida principalmente a homicidios vinculados a la delincuencia organizada.
“Y están organizados aproximadamente en agrupamientos de 30 elementos en toda la ciudad”, dijo Martínez.
Un refuerzo militar en las calles que afirmaron se coordinará a su vez con las diferentes corporaciones, esto luego de la reestructuración de las estrategias para frenar la violencia, luego de la pasada reunión de la mesa de seguridad.
“Debemos estar unidos y estamos trabajando de la mano para que precisamente estas reuniones que hemos tenido sean para coordinar aspectos, coordinar errores e implementar procedimientos en forma coordinada operativamente hablando”, afirmó Gilberto Landeros, secretario de seguridad en Baja California.
Aunque hay residentes como Estefany, que, a pesar de los dichos, no ven diferencia en las calles.
“Yo lo miro igual en mi colonia es igual si pasan, pero no tanto, así como tiene que ser no se”, señaló la residente de Tijuana.
Otros que por el contrario se sienten más seguros con el ejército en las calles, como Alma López y su hija Patricia López.
“Está bien que haya mucha vigilancia, se siente más seguro uno”, dijo Alma López.
“Si es más protección ellos andan hasta caminando”, agregó Patricia López, residente de Tijuana
Pero para Quijano, además de la disuasión con la presencia militar, la impartición de justicia es otro tema en el que poco se ha podido avanzar en el estado.
“Estamos apostando en la prevención y segundo a la sanción la impunidad sigue estando en niveles de un 90% una persona puede cometer un delito y hay un 90% de posibilidades que no le pase nada”, señaló el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad de Baja California.
Un reto mayúsculo que reconocieron las autoridades de la fiscalía general del estado.
“Comprendemos que el reto y el escenario que tenemos es bastante complejo y hay que también nuestra participación como institución de procuración de justicia es proporcionar aquella información de utilidad tanto jurídica como de inteligencia para judicializar a los responsables y dar golpes certeros a los generadores de violencia”, dijo Ricardo Carpio, fiscal general de Baja California.
Con la llegada de los militares se desplegarán estos operativos en zonas estratégicas que tienen un mayor índice delictivo. Un trabajo en teoría coordinado, que la delincuencia pone a prueba a diario y cuyos resultados, según el comandante de la segunda zona militar, el tiempo lo dirá.
“Y el esfuerzo y el compromiso de seguir adelante, el tiempo lo dirá”, puntualizó el comandante.
