Lo que inició como una fiesta, terminó en tragedia en el Cañón Emiliano Zapata de la colonia Libertad parte baja en Tijuana, este sábado. Un vehículo pasó por la zona, realizando detonaciones hacia los asistentes de la fiesta, dejando muertos y heridos en su paso.
De acuerdo a un reporte inicial de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), había cinco muertos, y dos lesionados como resultado del tiroteo que se reportó a las 23:15 horas del 27 de julio. Y el lunes, se confirmó que uno de los heridos también sucumbió a sus heridas resultando en seis muertes por el ataque.
Las autoridades identificaron a dos de las víctimas fallecidas como Cristian Ricardo Ledezma de 20 años, y Mario Eduardo Alonso Carrillo, de edad desconocida.
La identidad del resto de las víctimas fallecidas no fue revelado por las autoridades.
Una veladora fue colocado a las afueras de la vivienda en Mesa de Otay, esto en honor a las víctimas del fin de semana, quienes durante una fiesta en ese hogar, fueron sorprendidos por un automóvil que pasó por la calle y comenzó a disparar a los asistentes.
"Me sorprendí porque dije, los vecinos ahí a un lado de la casa", dijo Sandra Guzmán, vecina en el ataque armando en una fiesta en Tijuana.
Este lunes, restos de sangre y lo que parecía ser una celebración, se veían desde fuera de la calle Cañón Emiliano Zapata.
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"Desafortunadamente resultan seis personas que al final perdieron la vida", dijo el secretario de Seguridad Pública en Tijuana, Marco Sotomayor.
Sandra ha vivido junto al sitio del ataque por más de 28 años, y asegura la casa del ataque también era un taller mecánico.
"Mecánico el muchacho, arregla carros, ahí mirábamos carros que los arreglaba, hasta mi esposo de dio uno a arreglar ahí", dijo la vecina.
Hechos que investiga la policía, quién ha dicho parece un ataque planeado.
"Había un objetivo en específico y parece que era una fiesta de familiares de esa persona que si tenía antecedentes penales y desafortunadamente esos delincuentes privaron de la vida a los demás tratando de privarle la vida a esta otra persona", dijo Sotomayor.
Mientras, frente al servicio médico forense, los familiares de los fallecidos que no quisieron aparecer en cámara esperan sin poder recuperar los cuerpos de sus seres queridos.
Según vecinos, la violencia es el pan de cada día en esa zona.
"Es muy, muy, seguido, aquí cercas", dijo la vecina.
Este lunes, los homicidios en Tijuana alcanzaron los 1,318 en lo que va del año, 125 menos que el año pasado en estas fechas.
La policía aseguró que colaborará con el ejército para que no aumente el número de muertes.
"Que cuando se da un evento de está naturaleza el grupo rival contesta con la misma violencia y eso desafortunadamente provoca una escalada", dijo Sotomayor.
Este lunes, varias unidades de la Procuraduría General de Justicia llegaron al sitio para continuar con entrevistas a vecinos y seguir con las investigaciones del ataque armado que dicen vecinos como Sandra, hoy los mantiene más en alerta que nunca.
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