WASHINGTON DC - El gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presentó este martes un plan migratorio para reforzar la frontera, ante la posible rescisión en mayo de la norma sanitaria por la que ha estado expulsando a indocumentados durante la pandemia.
El gobierno federal lanzó esta iniciativa migratoria de seis puntos, pese a que el lunes un juez federal de Louisiana anunció que bloquearía la decisión del gobierno de acabar el 23 de mayo con el Título 42.
Dicho título es una medida amparada en la pandemia que impusieron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) en 2020, durante el mandato de Donald Trump, y que ha continuado bajo Biden.
Funcionarios de la Casa Blanca indicaron el martes en una llamada con periodistas que, pese a que no tiene "ningún sentido" y están en desacuerdo con la decisión del juez de Louisiana, el gobierno cumplirá con la orden del magistrado cuando sea expedida.
Aun así, explicaron que, una vez que el Título 42 sea levantado, el gobierno pretende "expandir de forma significativa" las expulsiones rápidas en la frontera a través del Título 8, que es la norma estándar por la que Estados Unidos realiza las deportaciones.
La expansión de esas expulsiones rápidas de indocumentados es uno de los pilares del plan presentado el martes, que también contempla un refuerzo de los efectivos desplegados en la frontera, con la suma de 600 más para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).
Otro de los pilares de la iniciativa es mejorar la eficiencia y la tramitación de los casos de migrantes en la frontera "para mitigar la saturación de las estaciones de la patrulla fronteriza y aliviar la carga en las comunidades de alrededor", dijo uno de los funcionarios.
El gobierno quiere hacer esto centralizando las gestiones que llevan a cabo varias agencias gubernamentales y modernizando los procedimientos con el uso de herramientas digitales.
Otro de los puntos del plan es reforzar el trabajo con las ONG para que puedan acoger a los migrantes después de que sus casos hayan sido tramitados por la CBP y estén a la espera de que se resuelva si pueden quedarse en Estados Unidos o son expulsados.
El gobierno de Biden agregó que desde este mes ha intensificado sus esfuerzos contra las redes de tráfico de personas, que, de acuerdo a sus datos, han resultado en más de 2,500 arrestos, investigaciones y en el desmantelamiento de su infraestructura.
Asimismo, el gobierno estadounidense trabaja con sus aliados en la región "para crear un enfoque más cohesionado y global" para manejar los flujos migratorios en el continente y recordó que en los últimos dos meses ha firmado acuerdos con Costa Rica y Panamá, y coopera de cerca con México.