En una serie de cartas que fueron enviadas a Washington, decenas de inmigrante narran la situación dentro del Centro de Detención de ICE manejado por el contratista CoreCivic.
OTAY
MESA- A puño y letra docenas de inmigrantes describen lo que viven adentro de
las instalaciones del Centro de Detención de Otay Mesa.Su única arma para
pelear el coronavirus es un papel y lápiz, y la esperanza de ser escuchados.
"En la
detención tenemos mucho miedo de contagiarnos porque en la unidad A en donde
estoy hay muchos de mis compañeros con dolor de hueso, dolor de cabeza, de
estómago, diarrea y fiebre", escribió uno de los detenidos.
Entre la multitud
de palabras escritas por decenas de migrantes, la más común es COVID-19 y más
allá del cuidado médico, sus palabras expresan la falta de una buena nutrición.
"La
alimentación que nos ofrecen pues no es la adecuada para la salud, nos
comunicaron que nos cambiarían la alimentación de nuestro menú, pero fue peor
porque los tres tiempos están pura pan de caña con jamón", dijo otra
detenida.
Las cartas fueron recolectadas por la señora Marisela Moreno, su hija lleva detenida desde enero de este año.
“Primeramente estuvo como tres semanas con temperaturas, dolor de huesos, y trató de hacer la cita para el coronavirus y le dijeron que no, solo le daban su ibuprofeno", dijo Moreno.
Actualmente hay alrededor de 160 migrantes con COVID-19 adentro de las instalaciones de Core Civic ubicada en Otay Mesa.
El juez federal Dana Sabraw de San Diego impuso una orden exigiendo su liberación tras la demanda de hecha por la Unión Americana de Libertades Civiles en contra de ICE.
Inmigración
“Una petición de emergencia pidiendo una orden de restricción que ordenaría la liberación inmediata de personas que por sus edades o condiciones médicas los hace más vulnerables a contraer el virus o a complicaciones muy serias o muertes en caso de contraerlo", dijo Monika Langarica, abogada de ACLU.
Algunos de los requisitos para calificar y ser liberados incluye tener al menos 60 años, y o alguna enfermedad crónica, diabetes, cáncer, VIH entre otras que representen un peligro para el sistema inmune en caso de contraer el virus.
La demanda también incluye una reducción en la población adentro de las instalaciones, para poder cumplir con la regulación impuesta por el CDC.
De ser cumplida, la orden dejaría libre a alrededor de 50 a 60 migrantes detenidos quienes están en alto riesgo de contraer el COVID-19.
Se espera que este lunes haya una audiencia de seguimiento entre ICE y Core CIvic que detallará quién ha sido liberado.
