El gobernador Gavin Newsom visitó el jueves la frontera entre California y México en el condado de San Diego para destacar las obras de construcción en uno de los puertos de entrada terrestres del estado.
La conferencia de prensa, programada originalmente para el mediodía, se retrasó debido a un terremoto de magnitud 7.0 en la costa del norte de California que desencadenó un aviso de tsunami que afectó a 5 millones de californianos. El gobernador estaba siendo informado sobre esa situación, dijo su oficina.
El gobernador pidió a la administración del presidente Joe Biden que ayude a conseguir más recursos federales para terminar el nuevo puerto de entrada en el condado de San Diego antes de que el presidente electo Donald Trump asuma el cargo en enero. La conferencia de prensa de Newsom incluyó una actualización sobre la construcción de una carretera hacia el nuevo puerto de entrada de Otay Mesa East que ayudará a facilitar la construcción del proyecto, que se ha demorado durante mucho tiempo y que comenzó en la década de 1990.
La financiación y la gestión del proyecto han sido dos obstáculos, dijo Newsom.
"Lo que hemos hecho es volver una y otra vez a Washington, D.C., y hemos logrado obtener cientos de millones de dólares en el presupuesto actual que se está debatiendo", dijo Newsom.
Newsom dijo que espera que Trump apoye el proyecto una vez que asuma el cargo en un esfuerzo por completar la construcción para 2027.
Se espera que el proyecto impulse el crecimiento del empleo y las oportunidades económicas en ambos lados de la frontera, reduzca los tiempos de espera para automóviles y camiones y mejore el movimiento de bienes y servicios en la zona fronteriza, según funcionarios estatales.
California
California tiene varios puertos de entrada terrestres, entre ellos San Ysidro, el cruce fronterizo por tierra más grande entre San Diego y Tijuana y el cuarto más transitado del mundo. También Otay Mesa, el segundo puerto de entrada más grande entre México y Estados Unidos, Calexico Oeste y Este, y Andrade, en el condado Imperial.
En marzo, Newsom visitó la frontera, donde promocionó el despliegue de miembros de la Guardia Nacional de California para detener el flujo de drogas ilegales, incluido el fentanilo. En la operación de 2023 se incautaron 62,000 libras de fentanilo, un récord, según la oficina del gobernador.
El despliegue de la Guardia Nacional de California se incrementó en todo el estado en junio, incluso en los puertos de entrada a lo largo de la frontera.
La visita se produce después de que Newsom y los legisladores estatales regresaran al Capitolio estatal el lunes para comenzar una sesión especial para proteger las políticas progresistas de California antes de otra presidencia de Donald Trump. El gobernador demócrata ha sido un feroz crítico de Trump.
"Trabajaremos con la administración entrante y queremos que el presidente Trump tenga éxito en su tarea de servir a todos los estadounidenses", dijo Newsom en un comunicado en el que anunció la sesión especial. "Pero cuando se extralimite, cuando se amenacen vidas, cuando se ataquen derechos y libertades, tomaremos medidas", agregó.
Newsom ha pedido a la legislatura que apruebe fondos adicionales para la oficina del fiscal general para prepararse para una lucha legal contra los desafíos federales previstos. Los demócratas tienen supermayorías en ambas cámaras en Sacramento y en todos los cargos estatales.
Ya se han presentado leyes para proteger las políticas estatales sobre el acceso al aborto, los derechos civiles, el cambio climático y la inmigración.
California demandó a la primera administración Trump más de 120 veces con distintos niveles de éxito.
Trump, que se refirió al gobernador demócrata como "Newscum" durante una parada de campaña en el sur de California, ha encontrado fallas con frecuencia en el estado más poblado del país, incluso en materia de inmigración y seguridad fronteriza.
Cuando se inauguró la sesión especial, cientos de personas se manifestaron alrededor del Capitolio por los planes de deportación masiva de la administración de Trump. Algunos llevaban pancartas que decían "Ni un centavo para la deportación masiva" y "MAGA fuera de California".
El fiscal general estatal Rob Bonta dijo que su oficina protegerá a la población inmigrante del estado.
Los legisladores republicanos criticaron a Newsom y sus aliados demócratas por la sesión especial. La senadora estatal Kelly Seyarto, republicana que representa a Murrieta en el sur de California, indicó que la sesión crearía una relación más adversa con el gobierno federal.
"Lo que estamos haciendo hoy es enviar ese mensaje exacto: que vamos a luchar con uñas y dientes por todo. ¿Y saben qué? Eso significa que van a luchar con uñas y dientes por todo", expresó Seyarto sobre la legislación propuesta.
Newsom no ha proporcionado detalles sobre lo que los legisladores considerarán, pero dijo que quería que la financiación estuviera lista antes del día de la toma de posesión de Trump, el 20 de enero. El estado gastó aproximadamente $42 millones en costos de litigio durante la primera administración de Trump, según los funcionarios.
Se proyecta que California enfrentará un déficit presupuestario de $2,000 millones el próximo año, con déficits mayores por delante.
California recuperó con éxito $57 millones entre 2017 y 2018 después de prevalecer en una demanda para impedir que el gobierno de Trump impusiera condiciones de aplicación de la ley migratoria en ciertas subvenciones federales de aplicación de la ley. Otra victoria legal sobre la pregunta de ciudadanía en el censo de 2020 obligó al gobierno federal a devolver $850,000 al estado, según la oficina del fiscal general.
Durante la primera presidencia de Trump, los fiscales generales demócratas se unieron para presentar demandas sobre inmigración, la prohibición de viajes del entonces presidente a los residentes de países musulmanes, el medioambiente y otros temas. Pero Trump tiene una posible ventaja esta vez: fue agresivo al nominar a juristas conservadores para los tribunales federales en todos los niveles, incluida la Corte Suprema.
