SACRAMENTO, California - Las grandes empresas que operan en California tendrán que hacer pública una amplia gama de emisiones que calientan el planeta en virtud de una nueva ley promulgada el sábado por el gobernador Gavin Newsom. Se trata del decreto más ambicioso de su tipo en el país.
La ley obliga a más de 5,300 empresas que operan en California y facturan más de $1,000 millones anuales a informar sobre sus emisiones directas e indirectas. Esto incluye las emisiones derivadas del funcionamiento de una estructura o una tienda, así como aquellas derivadas de actividades como los viajes de negocios de los empleados y el transporte de sus productos.
La ley aportará una mayor transparencia pública respecto a cómo los grandes negocios contribuyen al cambio climático, y podría impulsarlas a evaluar cómo pueden reducir sus emisiones, afirman sus defensores. Argumentan que muchas empresas ya revelan al estado parte de sus emisiones.
Sin embargo, la Cámara de Comercio de California, grupos de la agroindustria y gigantes petroleros que se oponen a la ley consideran que ésta establecerá nuevas obligaciones para empresas que no cuentan con la experiencia o los conocimientos necesarios para informar con precisión sobre sus emisiones indirectas.
Agregan que es demasiado pronto para implementar los requisitos en un momento en que el gobierno federal sopesa las reglas de divulgación de emisiones para las empresas públicas.
La medida podría crear una “duplicación” de trabajo si se adoptan las normas federales, escribieron la Cámara de Comercio estatal y otros grupos en un comunicado contra el decreto de ley.
California ha dado grandes pasos para marcar una tendencia en términos de política climática en años recientes. El estado se ha propuesto prohibir la venta de nuevos autos con motores de gasolina para 2035, ampliar las energías renovables y limitar la contaminación ferroviaria. Para 2030, el estado planea reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero un 40% por debajo de lo que eran en 1990.
Empresas importantes como Apple y Patagonia apoyaron el proyecto de ley, alegando que ya revelan gran parte de sus emisiones. Christiana Figueres, exfuncionaria clave de Naciones Unidas detrás del acuerdo climático de París de 2015, dijo en una carta que el proyecto de ley será un "catalizador crucial en la movilización del sector privado para resolver el cambio climático".