LAS VEGAS — El secreto a voces decía que el mejor momento de Saúl “Canelo” Álvarez había quedado atrás. Pero el mexicano se encargó de acallar esos cuestionamientos, al menos por ahora.
El campeón unificado de los supermedianos, dominó el sábado a Jermell Charlo y se impuso por decisión unánime.
“Nadie puede vencer a este ‘Canelo’", advirtió Álvarez, quen retuvo sus cetros.
El mexicano triunfó por anotaciones de 119-108, 118-109 y 118-109. Otras estadísticas fueron también desiguales: Álvarez asestó 42 ponches contra 11 de su contrincante.
Charlo, monarca unificado de los superwelter, subió dos categorías para enfrentar al “Canelo”.
“Simplemente sentí que no era yo el que estaba ahí”, reconoció. “No pongo pretextos. Así se dio la pelea”.
Pese a que fue el estadounidense quien ascendió dos divisiones, es cuatro pulgadas (10 centímetros) más alto que Álvarez, que mide 5 pies y 8 pulgadas. Charlo (35-2-1) tiene además ventaja de dos pulgadas y media (más de 6 centímetros) en el alcance.
Nada de eso importó.
Recientemente, habían surgido comentarios según los cuales Álvarez (60-2-2) comenzaba su decadencia. Quedó claro que la opinión del “Canelo” es distinta. Lució como en sus mejores combates.
Antes de este compromiso, había perdido por decisión unánime ante Dmitry Bivol en mayo de 2022, ganó por decisión unánime hace un año ante un Gennady Golovkin lejos de su plenitud, y en mayo había doblegado por fallo unánime a john Ryder.
Ahora, el peleador de Guadalajara puede mirar al futuro. El presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán, ha declarado que el méxico-estadounidense David Benavídez será el retador obligatorio por el cinturón de los supermedianos.
Pero Álvarez no se ha comprometido a enfrentar a Benavídez, de 26 años y quien tiene un registro de 27-0 con 23 nocauts. Si el “Canelo” vence a Charlo y se niega a pelear con Benavídez, el CMB podría declarar vacante su campeonato.
Se preguntó a Álvarez cuáles eran sus planes.
“Cinco de Mayo, contra quien sea, no me importa”, respondió.
El “Canelo” dedicó buena parte de su campamento a prepararse para enfrentar el reto que le plantearían las ventajas corporales de Charlo. Y demostró que estaba listo.
En cada asalto logró castigar y evitar el castigo.
“Sabíamos que él es un gran peleador”, dijo Álvarez. “Sabe cómo moverse en el ring. Trabajamos en atacar el cuerpo por tres meses. Tres meses en las montañas, sin mi familia y sin nada”.
En cuanto a Charlo, está listo para dar un paso atrás. Dijo que le encantaría medirse con Terence Craword (40-0), el campeón reinante welter y superwelter.
“Quiero volver a las 154 (libras”, indicó Charlo.