SAN DIEGO - La Guardia Costera realizó un operativo de cuatro meses que llevó a la incautación de los narcóticos en ocho distintos casos, únicamente en febrero y marzo a lo largo de las costas de México, Centroamérica y Sudamérica, logrando interceptar todo tipo de transporte acuático, desde improvisadas pangas, hasta balsas, barcos pesqueros y hasta un sofisticado submarino. Este último hace la labor de la guardia costera aún más compleja porque dicen es difícil de detectar, pero no imposible.
Este golpe al narcotráfico resultó en la incautación de 33,768 libras de cocaína que no llegaron a nuestras comunidades. El botín tiene un valor de $ 468 millones de dólares, informó la agencia.
“Es algo que tenemos que parar al narcotráfico para no traer las drogas a los Estados Unidos, queremos mantener a la gente a salvo y fuera de drogas”, dice Meylin Sánchez de la Guardia Costera de Estados Unidos.
“Yo me siento muy orgullosa porque lo que estamos haciendo acá es muy bueno, lo que la guardia costera estadounidense hace es proteger a los ciudadanos estadounidenses del tráfico de drogas es algo muy impresionante y me siento muy orgullosa de estar sirviendo a mi país”, agregó Sánchez.
Según la Guardia Costera, gracias a estas incautaciones habrá menos casos de sobredosis en las calles, menos violencia en las comunidades, y menos inestabilidad en las familias, asegurando que este ha sido uno de los operativos más exitosos de la historia en los recientes años
“Muchas veces la juventud no sabe que hay otras avenidas que pueden tomar, y tal vez parece una avenida fácil porque les ofrecen mucho dinero los narcotraficantes pero siempre hay un camino diferente que tomar, no necesariamente con el narcotráfico”, dice Sánchez.
Sabemos hasta este momento que la droga será trasladada a un lugar seguro, después la DEA tomará posesión de ella por un determinado plazo para posteriormente ser incinerada y así llegar a su total destrucción.
